martes, 26 de noviembre de 2019

CHARIS: Compartir el Bautismo en el Espíritu Santo

  •  EL SANTO PADRE A LA RENOVACION CARISMATICA
  • Compartir el bautismo en el Espíritu Santo
    Queridos hermanos y hermanas, ¡buenos días!
    Me gusta cómo se saludan en algunos pueblos en
    este tiempo de Pascua. No dicen: “Buenos días” o
    “buenas tardes”, dicen: “Jesús ha resucitado”. Nos
    saludamos así, juntos: “Jesús…” [todos responden:
    “ha resucitado”].
    Sí, ¡Jesús está vivo! Gracias por recordar cuánto
    me gusta este canto de entrada que habéis
    cantado.
    En esta solemnidad de Pentecostés comienza una
    nueva etapa en el camino iniciado por la Renovación
    Carismática hace 52 años. Renovación Carismática
    que se ha desarrollado en la Iglesia por voluntad
    de Dios y que, parafraseando a san Pablo VI, “es
    una oportunidad para la Iglesia” (cf. Discurso a los
    participantes en el III Congreso internacional de la
    Renovación Carismática Católica, 19 mayo 1975,
    Pentecostés).

  • En nombre de la Iglesia, agradezco hoy a la ICCRS y
    a la Fraternidad Católica la misión realizada en estos
    casi 30 años. Vosotros habéis marcado el camino y
    habéis permitido, con vuestra fidelidad, que CHARIS

    sea hoy una realidad. ¡Gracias!

    Gracias también al equipo de cuatro personas a
    quienes encargué la concretización de este nuevo
    En su discurso del 8 de junio, ante 4500 miembros de la Renovación Carismática Católica de todo
    el mundo, el Papa Francisco explicó claramente qué es CHARIS y qué espera la Iglesia de esa.
    Papa Francisco
    y único servicio; y al Dicasterio para
    los Laicos, la Familia y la Vida, en la
    persona del Cardenal Farrell, que los ha
    acompañado.
    Hoy termina una cosa y comienza otra:
    comienza una nueva etapa en este
    camino. Una etapa señalada por la
    comunión entre todos los miembros de la
    familia carismática, donde se manifiesta
    la presencia poderosa del Espíritu
    Santo para bien de toda la Iglesia. Esta
    Presencia hace que todos sean iguales,
    porque todos y cada uno ha nacido del
    mismo Espíritu; grandes y pequeños,
    con muchos años o recién nacidos,
    comprometidos a nivel universal o local,
    forman el todo, que es siempre superior
    a la parte.
    Nuevo y único servicio de comunión
    Vamos hacia la unidad: este es el camino
    del Espíritu.
    Nuevo. Como os dije en el Circo Máximo,
    lo nuevo puede desestabilizar. Existe al
    comienzo una sensación de inseguridad
    ante los cambios que lo nuevo puede
    traer: a veces uno prefiere permanecer
    con lo suyo, y se separa de la unidad. Y
    esta es una tentación del diablo: cada
    vez que alguno siente: “No, lo mío es
    más que lo de aquel”, y “yo prefiero
    lo viejo a lo nuevo”, allí está el diablo,
    porque me separa de la unidad. Es
    humano tener un cierto temor a lo
    nuevo —esto sí, es verdad— pero no
    es el caso en las personas espirituales:
    «Yo hago nuevas todas las cosas», dice
    el Señor en el libro del Apocalipsis
    (21,5). Nuestro Dios es el Dios de las
    novedades. Las novedades de Dios son
    siempre de bendición, porque proceden

    de su corazón amoroso. Existe siempre
    la tentación de decir: “Estamos bien
    como estamos, lo estamos haciendo
    bien, ¿por qué cambiar? Dejémoslo
    como está; nosotros sabemos cómo
    se hace”. Este pensamiento no viene
    del Espíritu, al menos no del Espíritu
    Santo, tal vez del espíritu del mundo…
    No caigan en ese error. «Yo hago nuevas
    todas las cosas», dice el Señor.
    Nuevo y Único. Un servicio para todas las
    realidades carismáticas que el Espíritu ha
    suscitado en el mundo. No un organismo
    que sirve a algunas realidades y otro
    organismo que sirve a otras realidades, y
    un tercero…y así. ¡No!, único.
    Servicio. No gobierno. A veces lo que pasa
    es que en las asociaciones humanas, tanto
    laicas como religiosas, existe la tentación
    de ir siempre buscando el beneficio
    personal. Y la ambición de que nos vean,
    de mandar, del dinero… Siempre lo mismo.
    La corrupción entra así. ¡No!: servicio,
    siempre servicio. Servicio no quiere decir
    “embolsillar” —el diablo entra por el
    bolsillo—; servicio quiere decir dar: dar,
    darse.
    Comunión. Todos con un mismo corazón
    vuelto al Padre para dar testimonio de
    la unidad en la diversidad. Diversidad
    de carismas que el Espíritu ha suscitado
    en estos 52 años. “Alargar las cuerdas
    de la tienda”, como dice Isaías 54
    (cf. v. 2), para que quepan todos los
    miembros de una misma familia. Una
    familia donde hay un solo Dios Padre, un
    solo Señor Jesucristo y un solo Espíritu
    vivificante. Una familia en la que un
    miembro no es más importante que
    otro, ni por edad, ni por inteligencia,
    ni por sus capacidades, porque todos
    son hijos amados del mismo Padre. El
    Nuevo y único
    servicio de comunión
    4 CHARIS Magazine no. 1 - Julio 2019 CHARIS Magazine no. 1 - Julio 2019

No hay comentarios:

Publicar un comentario